jueves, 23 de abril de 2009

¡Devuelvanme mis 17 años!



Desde hace algunas semanas vivo en Roma, tengo 17 años y contesto si me llaman Niki.
No es que me haya vuelto loca, es que estoy tan metida en la historia contada por Federico Moccia en Perdona si te llamo amor que he llegado a enfadarme con el autor cuando las cosas no le salen a la protagonista como yo quisiera.
El autor, según mi criterio, no es que escriba maravillosamente bien, pero sí que consigue maravillosamente bien que te identifiques con sus personajes. Comienzas a leer y ya no puedes parar, quieres saber qué pasará, qué decisiones tomarán; sonríes con ellos, sientes cada beso, te metes en su piel. Y últimamente yo veo los ojos a través de una muchacha de 17 años. Una muchacha que es radicalmente distinta a la chica que era yo a su edad y que vive historias completamente diferente a las mías.

Echo de menos mis 17 años. Esa vida sin preocupaciones, llena de ilusión, de ideas, de sueños, de planes por hacer, de tardes eternas en la calle con amigos sin prisa alguna.
No es que ahora esté mal ni que no me guste mi vida, simplemente habría cosas que cambiaría, como nos pasa a todos. Pero tengo miedo de haberme perdido cosas, de haber sido madura antes de tiempo (y aún estoy en la veintena, no os creáis), de haber dejado escapar momentos que no se pueden recuperar.
Será la crisis de los veintitantos.

Estoy deseando que llegue la hora de irme a la cama, meterme entre las sábanas, coger el libro (que es un tochaco, estoy echando brazo de sujetarlo jeje) y ver cómo acaba la historia, porque esas 40 páginas que me quedan me las ventilo hoy.
Dentro de poco volveré a responder por Niki.

3 comentarios:

  1. pues habrá que leerse el libro.
    gracias por el tip.

    ResponderEliminar
  2. Pues este libro me pareció una mierda absoluta. La historia es pésima y poco creíble, está redactada con muy mal gusto literario, etc...
    Nada, que hoy en día sigo arrepintiéndome de haberme dejado guiar por la crítica en "El País Semanal", y haber comprado el libro cual becerro desorientado.

    ResponderEliminar
  3. No se puede leer este libro esperando encontrar una magnífica obra literaria, sino más bien algo escrito para ser un best seller y hacerte pasar un buen rato.
    Al menos acabas sabiendo dónde comer buenas pizzas y tomar buenos helados ;)

    ResponderEliminar